Había salido del restaurante y como si un rayo me cayera encima para partirme en dos, así, sin motivo aparente mi ánimo cambió. La tristeza invadió todo mi cuerpo sin que pudiera percatarme del motivo, como si una fuerza extraña robara toda la felicidad de mi corazón, felicidad grabada, tan profundo en mi alma, que no logro recordar si alguna vez la he sentido. Sentía que iba a desfallecer.
En plena calle mi cuerpo exigió detenerme, de esa manera, en el caos de los transeúntes, yo era la única inmóvil, percibiendo el terror de los que saben cómo observar. Mi cuerpo se puso tenso, mis manos empezaron a temblar y la cabeza empezó a darme vueltas; mi mente comenzó a actuar de forma muy acelerada haciendo que todo lo que ocurría fuera de mí se viera en cámara lenta. En esos momentos todo cambia (dentro y fuera de mí) y todo se distorsiona.
Una situación de todos los días, unas veces es más fuerte y otras más sutiles, algunas veces debo detenerme, como en esta, y en otras debo correr, saltar, gritar o golpear a alguien.
El porqué de ello, es algo que siempre me pregunto. No sé si hay otras personas a las que les pasa eso, quisiera saberlo, pero más que encontrar a gente con esto, quisiera una respuesta, pero no una explicación como las del psiquiatra que te recetan antipsicóticos para controlar estas situaciones, si no una que ayude a comprenderme desde una perspectiva más espiritual.
No hay nada peor que el sinsentido, el mundo del caos y de las mentiras, lo irreal, del miedo y el sufrimiento. La calma del medicamente es una farsa. Creo que comienzo a observar algo que no se debe, el mundo de las verdades, más allá de la ciencia, la realidad expuesta ante mis ojos. Sin embargo, no estoy preparada para tal contemplación, ni yo ni nadie; primero debo aprender, siempre aprender, eso nunca falla ni aburre, y así limpiar mi corazón de la ignorancia del que el mundo te atrapa.
Las lágrimas brotan sin que me dé cuenta y cuando todo parece extinguirse (hasta mi vida), en la tristeza sinsentido, puedo ver algo brillando muy sutilmente: luego del dolor llega la calma; tendré que esperar, quizás no hoy ni mañana, pero sé que algún día llegará y mi mente podrá ver la verdad. El movimiento retorna y puedo seguir caminando.
3 comentarios:
>.<!! que curioso me paso algo muy similar hace poco mientras iva a comprar el pan a totus como todos los dias weno el ausnto es q cuando estaba entrando de pronto me invadio una sensacion de panico como si algo realmente malo estuviera pasando a mi alrededor y senti el corazon apretandose muy fuerte,pero me empezaron a temblar las manos pero aun asi podia caminar aunque sentia que realmente me estaba costando mucho esfuerzo el poder avanzar fue quiza tana la sensaicon que uno de los guardias se acerco a ver si estaba bien le dije que si y segui avanzando aunq mientras avanzaba mas me dolia el corazon y la punta del dedo incluso llegue a pensar q estaba por tener un atrque al corazon por raro que suene o.o!! pero es q ese dolor en la punta del dedo me quedo por un buen rato u.u!! me pregunto yo tmbn ... q habra sido lo q senti o.o???
hablas de dolor? hablas de confusion? hablas de duda? emociones muy humanas, eso es cuanto eres en esta vida... cierto es, uno en el momento menos esperado pierde el sentido de la realidad, todo se paraliza por unos segundos, y luego se retoma a velocidad vertiginosa, nos olvidamos caminar, como hablar, como respirar, como si quiera nos llamamos... algun dia explicare mi teoria referente a esto, pero gracias por reafirmarla...
Aun queda la duda... la eterna limitrofe de nuestra mente... nuestra verdadera enemiga, la duda compañera de la ignorancia y hueste del caos... su existencia nos sirve para enseñarnos que tan vacios somos y cuanto aun nos falta para aprender de cuanto nos rodea... estos segundos que tuviste fuera de ti son algo que te hara caer en cuenta todo lo humana que eres...
Skar, parece que has sentido, aunque sea una vez, lo que siempre me sucede.
JameX tienes razón en varias cosas, pero en una no, cuando cuento mi experiencia lo hago de forma litearal. Realmente me pongo en un estado así. Es verdad que todos pueden sentir el sentido de realidad, pero esa no es la idea, mi idea.
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